Es el deporte de moda. De eso no hay duda. Pero también es una actividad que requiere de preparación y prevención para evitar problemas físicos. Hoy, vamos a hablaros sobre las lesiones más frecuentes en pádel. ¿Estáis preparados? ¡Comenzamos!
Como cualquier actividad deportiva, el pádel nos gusta y nos atrae. Sin lugar a dudas, es realmente divertido jugar un partido con amigos. Además, da igual el nivel que se tenga, ya que el disfrute está prácticamente garantizado. Del mismo modo, con un poco de constancia, la curva de aprendizaje es también muy amable, progresando de manera constante durante las primeras etapas. Todo ello hace que para muchas personas sea una actividad adictiva.
No hace demasiado, en este mismo espacio, ya os acercamos una serie de consejos para elegir pala de pádel. ¿Sabías que no todas las palas están recomendadas para todas las personas? No solo puede diferenciarse entre sexos, sino que altura, peso, fuerza o edad también son condicionantes muy a tener en cuenta. Por supuesto, el estilo de juego también marcará la decisión final. Te aconsejamos esta lectura si no lo tienes claro.
Estas son las lesiones más frecuentes en pádel
Según las estadísticas, estas son las lesiones más frecuentes en pádel que podemos sufrir:
- Lesiones musculares.
Como en muchos deportes, las lesiones musculares son comunes en el pádel, especialmente en los músculos de las piernas y la espalda baja. Esto puede incluir distensiones musculares, tirones y calambres causados por movimientos bruscos, cambios de dirección rápidos y esfuerzos repetitivos. - Lesiones en los codos.
¿Sabías que el pádel puede ejercer una presión significativa sobre los codos debido a la naturaleza repetitiva de los movimientos de golpeo? Esto puede implicar la aparición de la epicondilitis lateral, también conocida como codo de tenista. Se trata de una lesión común que afecta a los tendones en el exterior del codo y puede causar dolor y molestias al golpear la pelota. De todas las lesiones más frecuentes en pádel, esta es, sin lugar a dudas, una de las más habituales y más temidas también. - Lesiones en los hombros.
Los movimientos de golpeo en el pádel pueden poner tensión en los hombros, lo que aumenta el riesgo de lesiones como la tendinitis del manguito rotador y la bursitis. Estas lesiones pueden causar dolor y limitar la movilidad del hombro, lo que afecta negativamente al juego. - Lesiones en las rodillas.
Del mismo modo, los habituales movimientos rápidos y los cambios de dirección en el pádel pueden aumentar el riesgo de lesiones en las rodillas, como esguinces de ligamentos y lesiones meniscales. Estas lesiones pueden ser el resultado de giros bruscos, saltos y caídas durante el juego. - Lesiones en los tobillos.
Para terminar este post sobre las lesiones más frecuentes en pádel, no podíamos olvidarnos que los movimientos explosivos y los cambios de dirección repentinos pueden aumentar el riesgo de torceduras de tobillo y esguinces. Esto puede ocurrir al intentar recuperar una pelota lejos de la posición inicial o al realizar movimientos defensivos rápidos en la pista.
¿Has sufrido alguna de estas dolencias durante la práctica del pádel? Esperamos que no y que en el futuro también las puedas esquivar. Recuerda que la prevención es siempre nuestra mejor aliada.